Hay días que necesito volver a casa con la música a tope al salir del laboratorio. Me relaja y me regala unos segundos de felicidad. Cantar y gritar. Ayer era uno de esos días. Nada más y nada menos que volví con Janis Joplin y su «Cry baby». En seguida me vinieron recuerdos de esos largos días escribiendo la tesis. Janis me acompañaba con su voz desgarrada y su sentimiento. Después de acabarla y defenderla, estuve mucho tiempo que no quería ni oirla, quería olvidar esa temporada. Pero ayer fue diferente, no tenía una sensación de pesadez y agobio, sentía que me había liberado. ¡Por fin! Y eso me ha hecho un poco más feliz. A partir de ahora, solo llorará ella.
Gracias a ese momento, empecé a recordar momentos de laboratorio realmente buenos acompañados de buena música. Vibrar con el «Aire» de José Mercé mientras montas un western blot. Bailar Fangoria esperando a que se acabe el interminable ensayo de Pulso y Caza. Oir rock del bueno mientras procesas las orinas y aislas el ADN. Seguir el ritmo de extremoduro con los pies mientras jugueteas con el IGV. E incluso disfrutar de un poco de Sigur Rós mientras programo. Buenos momentos en los que la música te lleva un poco más allá y te hace disfrutar doblemente del trabajo, te motiva. Estimula tu creatividad y aumenta tu concentración. Y es que a la hora de escribir un artículo debería haber una sección «Sources of inspiration» en la que pudieras añadir qué música te ha inspirado y ayudado en la realización del proyecto, sin pagar ningún canon por supuesto. O qué imagen, cuadro o escultura estabas observando cuando de repente lo entendiste todo y te cuadraban los datos y las evidencias. O cualquier otro momento de inspiración que te haya ayudado a acabar el proyecto. Al fin y al cabo, es tan importante que tú estés motivado como seguir el protocolo correctamente, o ser sistemático, tanto como creativo.
Y vosotros, ¿Creéis que se deberían poner las aportaciones artísticas que te han ayudado a finalizar los proyectos? ¿La música te acompaña o te ayuda?
5 comentarios
Jose dice:
26 mar 2013
Hola Jorge, gracias por este post.
Hay un programa en Radio Clásica (RTVE), «Juego de espejos», que me gusta mucho y del que me llama la atención, según los propios invitados confirman, el papel que juega la música durante el proceso creativo de sus trabajos. Los invitados (investigadores, escritores, pintores o escultores, …) en este tema demuestran que no hay punto medio y se dividen al 50% entre aquellos que no pueden trabajar con música y aquellos que la necesitan para continuar «inspirados».
Jorge dice:
27 mar 2013
Jose, gracias a ti por leernos.
Pues no conocía el programa. Tengo que reconocer que aunque la mayoría de las veces me gusta y necesito trabajar con música, hay momentos en los que el mayor de los silencios se agradece sobremanera.
Un abrazo
Pablo dice:
27 mar 2013
En los agradecimientos de mi tesis debería figurar «La ley innata», de Extremoduro. A mi modo de ver, cuarenta y tantos minutos perfectos de melodía encadenada que te acompaña sin reclamar protagonismo, mientras escribes, ayudando a que las ideas fluyan de tu cabeza al teclado. Y sí, creo que los artículos deberían incluir esa referencia a la obra que ha acompañado al autor en su trabajo. Generaría una interesante base de datos que podría cruzarse para analizar correlaciones entre arte y ciencia.
Jorge dice:
27 mar 2013
Qué gran disco, cada vez que lo escucho me gusta más, lo tiene todo. Yo también me lo pongo mucho en el laboratorio que estoy ahora.
La verdad es que sería interesante poder agrupar los diferentes estilos musicales según el ámbito y el campo científico. Seguro que saldría algo significativo.
Maria. dice:
18 abr 2013
No sé si habría que incluir ese apartado, hay veces que la inspiración no viene en un formato tan glamuroso, si no que viene en los momentos de fisiológica cotidianidad……..y explicar eso, como que le quita caché al paper! ;D
Bromas aparte, no solo escuchar música mientras se trabaja si no que, dedicar tiempo suficiente a actividades «extra-laborales» es necesario para que el pensamiento fluya mejor, se amplíe tu universo y por tanto des respuestas más creativas.